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Legado poético de Andrés Eloy Blanco se mantiene vigente

El 6 de agosto de 1896 nació en Cumaná, estado Sucre, el escritor, ensayista, periodista, abogado, humorista y político venezolano Andrés Eloy Blanco Meaño, quien dejó un importante legado para las nuevas generaciones.

Bajo las directrices del ministro del Poder Popular de Comercio Nacional, Coronel Antonio Morales, el Servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual (SAPI), se une a esta celebración e invita a las y los poetas venezolanos a proteger los derechos morales y patrimoniales sobre sus obras de ingenio de carácter creador, productos y producciones de índole literaria, artística o científica, y las expresiones culturales del pueblo, en atención a las 7 Líneas de Trabajos emanadas del presidente de la República, Nicolás Maduro.

“El poeta del pueblo”, quien perteneció a la Generación del 28 y se destacó por ser un luchador social, traspasó fronteras, en especial con Píntame Angelitos Negros, uno de sus poemas más sentidos en contra de la discriminación racial, que se hizo famoso en una canción del cantante de nacionalidad cubana Antonio Machín, cuya versión musical pertenece al actor y compositor mexicano Manuel Álvarez “Maciste”, y su interpretación como bolero del actor y cantante azteca Pedro Infante.

El trabajo literario de Andrés Eloy Blanco, reconocido como un gran orador, obtuvo diversos reconocimientos, por cultivar los géneros de poesía, cuento, ensayo, dramaturgia y periodismo.

Estas son algunas de sus obras: “Canto a la Espiga y al Arado” (1916), “Canto a España” (1923), “La aeroplana clueca (1935), “El pie de la Virgen” (1937, teatro); “Barco de piedra” (1937), “Liberación y Siembra” (1938), “Navegación de altura” (1942), “A un año de tu luz” (1951), “La Hilandera” (1954), “El poeta y el pueblo” (1954) y la “Giraluna” (1955) y “La Juanbimbada” (1959, póstumo).