El Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual (SAPI), arriba este sábado a sus 23 años configurando una estructura de blindaje y defensa de los poderes creadores del pueblo, como eje transversal para el desarrollo económico nacional
Cada primero de mayo este ente adscrito al Ministerio del Poder Popular de Comercio Nacional, celebra un nuevo año al servicio de la innovación y la creatividad, traducida en Marcas, Patentes, Derecho de Autor e Indicaciones Geográficas.
Desde la Dirección General del SAPI, se ha impulsado la implementación de diversos mecanismos digitales, orientados al cumplimiento de las medidas de prevención y bioseguridad decretadas por el Gobierno Bolivariano, a fin de proteger la salud pública.
Eficiencia tecnológica en cifras
La Taquilla Virtual se consolidó como uno de los principales logros del SAPI, desde el año 2020 hasta la fecha, atendió más de 27.000 empresarios, emprendedores e inventores, quienes accedieron a esta plataforma para gestionar trámites y consultas sobre la exclusividad de sus obras.
Para ello, el ente desplegó canales oficiales de comunicación vía remota mediante la mensajería instantánea por WhatsApp (0412-3963618); correo electrónico: recepcionvirtualsapi@gmail.com; redes sociales: @sapi_ve en Twitter y @sapi_venezuela en Instagram.
En medio del decreto de Estado de Alarma, esta iniciativa hizo posible la concesión de más 9000 marcas nacionales y provenientes de otras latitudes, 72 Patentes y 103 certificados de Derecho de Autor, cifras que cristalizan la voluntad de los venezolanos que apuestan por sus ideas desde el mercado.
En esta área, SAPI procesó solicitudes para el registro de productos, nombres comerciales, servicios y lemas comerciales, al tiempo que efectuó publicaciones en prensa, devoluciones por forma y fondo, renovaciones, cesiones y fusiones.
Otra conquista tecnológica de este último año, fue el lanzamiento del nuevo portal web, con una interfaz más práctica, interactiva y amigable para brindar una experiencia de navegación cómoda, segura y eficaz.
Apostando al intelecto soberano
En aras de reafirmar su compromiso con la legitimación de invenciones, el SAPI reanudó el proceso de concesión de Patentes sobre modelos y diseños industriales, con la publicación del Boletín N° 602.
Y apostando en transformar, o convertirse en una de las mejores de América Latina, se reinauguró la Oficina de Patentes con la finalidad de brindar espacios que permitan la optimización, digitalización, archivo y control de los procesos del área.
En el ámbito artístico, el ente suscribió un convenio interinstitucional con el Ministerio de Cultura para fortalecer el sistema de protección de la Propiedad Intelectual, con la instalación de mesas de trabajo que propicien la participación de productores, directores, actores, músicos, pintores y cultores en general.
En materia de formación e intercambio de saberes, el ente ha adelantado un esquema de video conferencias en línea para brindar asesoría e informar a la colectividad sobre los procesos de transformación tecnológica en virtud de la salvaguarda intelectual soberana.
Conquista histórica y universal
A través del SAPI, Venezuela se adjudicó la Vicepresidencia del 32° Comité Permanente del Derecho de Patentes (SCP), de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), lo cual simboliza una conquista icónica para la Patria al representar a América Latina y el Caribe en el análisis de la pertinencia de la aplicación de condiciones para la obtención de los derechos sobre las invenciones y su calidad.
Y es que, desde el primero de mayo de 1998, el Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual no solo conjuga instrumentos jurídicos para avalar los derechos inalienables de autores y creadores a escala nacional, sino que además, certifica su blindaje universal mediante convenios y tratados con sello internacional.
En el contexto actual y bajo la premisa de salvaguardar la tutela del ingenio soberano y siguiendo lineamientos de la titular de Comercio Nacional, Eneida Laya, el SAPI se perfila como un ente garante del estímulo de los poderes creadores, cimentando las bases para fomentar la innovación cultural como potencia económica de la Nación.